No es otoño la estación

no hay verso

por más rastrero

que no aspire a lo alto: estrella

o farol iluminando el ser

de la palabra.

         Eugénio de Andrade

 

Empezaban las hojas a caer, o no caían en absoluto,

y los corazones deseaban iniciar de nuevo su labor,

una terca y cerrada dádiva buscaban,

la que no se da en los salones, la silenciosa.

 

Y era el tiempo una bola de papel,

una cansada manera de decir que estamos vivos,

presos de la voz que decía: “¡Levántate!”.

Nuestras manos descansaban en el aire.

 

Es lenta la búsqueda y confusa y oscura,

la piedra filosofal no va a aparecer.

Los deseos se marchitan en este patio de naranjos.

A veces hay rostros que salvan la pesquisa, amados rostros de un minuto.

 

Las nubes bendicen a los tardos, a los que callan.

Es el día una lenta manera de decir: “Te quiero”.

Hay tinta que mancha los codos y el cielo se aleja, se aleja.

Conocemos lo fundamental en un callejón donde oímos un susurro:

“La lluvia cae y conoce tu nombre, cae la lluvia que antes del tiempo te acarició”.

لا يوجد بيت شعر

مهما كان تافهاً

إلّا و يطمح للأعالي: لنجمة

أو لمنارة تضيء كائن

الكلمة.

إوخينيو دي أندرادي

 

بدأت تتساقط الأوراق، وربّما لم تكن تسقط أبدا،

كانت القلوب ترغب بالعمل من جديد،

كانت تبحث عن نعمة ثابتة محصورة،

لا تُمنح في الأماكن العامة،

نعمة صامتة.

 

وكان الوقت كرةً من ورق،

طريقة متعبة للقول إننا أحياء،

مسجونون في الصوت الذي كان يقول:

"انهص!"

وكانت تسترخي أيادينا في الهواء.

 

البحث بطيء ومحير ومظلم،

 

وحجر الفلاسفة لن يظهر.

تذبل الرغبات في فناء أشجار البرتقال.

لكن وجوها ودودة في بعض الأحيان، تسعف الموقف ولو لدقيقة.

 

 

الغيوم تبارك المساءات/ المساءات الصامتة.

إنه يوم طريقة بطيئة لأقول:

"أحبك"..

ثمّة حبرٌ يلطخ الأكواع والسماء تبتعد.

وصوتٌ هامس يتردّد في الزقاق:

 

"يسقط المطر ويعرف اسمك.. يسقط المطر الذي داعبتك قطراته قبل موسمه".

Juan Felipe Robledo

JUAN FELIPE ROBLEDO (1968)

Nació en Medellín. Estudió Literatura en la Universidad Javeriana de Bogotá, donde es profesor. Ha preparado antologías de Francisco de Quevedo, Luis de Góngora, el Romancero español y Rubén Darío. Ganó el premio internacional de poesía Jaime Sabines 1999 en México con De mañana, libro que Editorial Planeta reeditó en Colombia en 2003. Ganó el premio nacional de poesía del Ministerio de Cultura 2001 con La música de las horas. Poemas y artículos suyos han sido publicados en revistas y periódicos de distintos países de Hispanoamérica. Han aparecido varias antologías de su poesía.